Mensaje para Sol

Mensaje para Sol

En celebración del Día Internacional de las Niñas

Si tuviera la capacidad de viajar en el tiempo y volver atrás para conversar conmigo misma cuando era una niña, digamos, de 7 años, ¿qué mensaje llevaría? Primero, diría que todo va a estar muy bien, que vamos a tener muchos motivos para sentirnos orgullosas. 

Después diría: debes saber que, aunque tu casa es un matriarcado, el mundo lo dominan los hombres. Pero para cuando tengas 45 ya muchas cosas van a ser distintas y tendrás mucha esperanza de que tus sobrinas (de tu edad en ese momento) tendrán una vida adulta —como mujeres— todavía más libre, con más igualdad de condiciones. 

Por cierto, para ese entonces serás la mamá de un maravilloso niño, tu más grande maestro. Vas a ser y hacer muchas cosas en tu vida, pero la experiencia de ser madre es una de las que más te va a transformar de una forma profunda, amorosa, radical y desgarradora. Esa experiencia te va a partir en pedazos y volver a crearte. Darás a luz a dos seres, a tu hijo y a una versión inesperada de vos misma. 

Le diría a esa niña que me siento orgullosa, que todo ese dolor por el mundo te ayudará a construir un propósito para servir, para tratar de dejarlo mejor que antes. Ciertamente habrá retos de camino, habrás de experimentar en carne propia muchas batallas que forjarán tu carácter. Cometerás muchos errores y tendrás muchos aciertos; pero no debés preocuparte, porque tenés adentro todo lo que se necesita para seguir, para crecer, para brillar. 

Además, vas a tener muchas personas importantes a lo largo del camino: las piedras angulares, las estructurales y las que vendrán como regalos del universo para acompañarte, enseñarte, ayudarte a tomar decisiones. Te va a costar mucho aprender a aceptar ayuda, porque eso nos pasa a las mujeres fuertes, independientes, y esa será una de las principales búsquedas de tu vida, encontrar el equilibrio. 

A los 45 vas a estar en un buen lugar personal, después de haber pasado tiempos muy intensos, muy retadores. Pero el mundo estará bastante complicado y yo se que ya lo sabés, que ya lo anticipás. Por eso, confía siempre en tu instinto de que es bueno prepararse para lo peor y desear siempre lo mejor. Eso te va a ayudar como un compás para avanzar. 

Diría, me tengo que ir, pero te dejo un último consejo: no tengás tantas ganas de crecer rápido… date chance, te va a hacer falta haber sido niña un poquito más tiempo. Eso sí, esa experiencia te va a ayudar a valorar mucho a los niños y las niñas, a entender lo importantes que son en el mundo, en nuestras familias, en nuestras vidas. Te quiero, ¡se feliz!

*Una versión de este texto fue publicado originalmente en el Newsletter 333 de Debi Nova e Hija de Tigre

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